En Brasil, una estación de autobuses decidió abrir sus puertas durante la noche para que los amigos peludos que no tiene hogar vayan a dormir.

Los trabajadores del sitio, además, les prepararon unas camas hechas con neumáticos y cobijas para que estos perritos no tengan frío.

Con el tiempo, la estación de Curitiba se ha transformado en un punto de referencia para las adopciones de los peludos.

No hace falta mucho para hacer una buena acción y este es un claro ejemplo como poder ayudar con un simple gesto de amor y bondad.

¡Más amor en el mundo por favor!